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Jornada Mundial del Enfermo: «Acompañar en la soledad”

Enterarse de que un familiar padece una enfermedad crónica es devastadora. La familia se tendrá que enfrentar a un vaivén de emociones y es muy común que el enfermo tarde un tiempo en comprender y aceptar lo que está pasando en su organismo. Esto es lógico, ya que no se nos prepara para estas situaciones. El cuidado de personas mayores dependientes, o de enfermos con algún tipo de enfermedad, es un tipo de tarea que requiere de tiempo, dedicación y mucho esfuerzo. Los familiares no solamente tendrán que cuadrar este cuidado con sus otras obligaciones (otras obligaciones familiares o laborales, por ejemplo), si no que también tendrán que lidiar con un elevado nivel de estrés que les puede pasar factura antes de lo que parece. Si es necesario cuidar al paciente las 24 horas del día, lo más habitual es que el cuidador tenga que renunciar a sus compromisos laborales, a hacer planes de ocio, u otras actividades que llevaba a cabo habitualmente. Esto es todavía peor si tan solo hay un cuidador. Cómo no todas las personas pueden hacerse cargo de un enfermo, no queda otra que optar por la asistencia sanitaria. Es un servicio que permite que exista un enfermo que acompañe a la persona enferma en todo momento, que se dedique enteramente a la misma y atienda cualquier necesidad que pueda llegar a tener.

“Acompañar en la soledad” es el lema de la Jornada Mundial del Enfermo 2020. El departamento de Pastoral de la Salud ha editado los materiales para esta Campaña que en España tiene dos momentos: el 11 de febrero, festividad de Nuestra Señora de Lourdes, es el Día del enfermo, de carácter mundial. La Iglesia en España celebra el 17 de mayo la Pascua del enfermo.

El tema propuesto para la Jornada Mundial del Enfermo del 11 de febrero es «Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré». En España, acogiendo este tema, «nos proponemos fijarnos en una de las causas de ese cansancio que piden ser aliviadas: la soledad. Con sólo echar una vista a los datos de la soledad nos damos cuenta que tiene las dimensiones de una auténtica epidemia. Según el Instituto Nacional de Estadística, se estima que en España hay 4,7 millones de hogares unipersonales. Dos millones de personas mayores de 65 años viven solas. Más de 850.00 mayores de 80 años viven solos y muchos presentan problemas de movilidad. Solo estas cifras son un dato preocupante. Si además sumamos, entre otras formas de soledad, la de quienes están ingresados en los hospitales o la de las familias con miembros con una enfermedad mental grave, por ejemplo, descubrimos lo acuciante de reflexionar para buscar el modo de aliviar tanta soledad», se explica en la presentación de los materiales.

 

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