En este segundo episodio del podcast del Proyecto Creciendo Juntos de la Asociación Gaen conocemos la historia de Jesús, cuidador y gerente de Asiste Granada. Nos narra los comienzos de su vocación y las historias de los pacientes con los que ha trabajado a lo largo de sus más de 22 años de trayectoria. Para él cuidar y ayudar a estas personas no es solo un trabajo es una filosofía de vida.
Del voluntariado a la enfermería: La historia de Jesús y su pasión por el cuidado de personas dependientes
Jesús García comienza narrando su camino en el mundo de los cuidados, unos inicios algo inesperados, tras ser voluntario en una asociación por su experiencia con la esclerosis múltiple. Esto lo llevó a estudiar auxiliar de enfermería y dedicarse por completo a cuidar a personas dependientes, especialmente con enfermedades neurodegenerativas como ELA y Parkinson. A lo largo de los años, ha trabajado en centros de día y a domicilio, atendiendo a personas en diferentes etapas de sus enfermedades y apoyando tanto a los pacientes como a sus familias en el proceso.
La importancia del cuidado humano y el apoyo a pacientes y familias
Jesús nos comparte su experiencia en el cuidado de pacientes, destacando la importancia de acompañar tanto a la persona con la patología como a su familia. Habla sobre cómo ha creado lazos fuertes y cercanos con las familias, incluso manteniendo relaciones familiares a lo largo de los años. Además, nos narra su reciente trabajo con un joven de Jaén con atrofia muscular espinal, subrayando lo gratificante que ha sido ayudarlo en su vida diaria, desde su asistencia personal hasta apoyarlo en sus estudios universitarios. Jesús enfatiza la necesidad de un enfoque más humano y comprensivo en el cuidado, especialmente para aquellos con necesidades especiales. A continuación destaca la importancia de tener una familia que no sobreproteja y que brinde recursos, lo que ha permitido a esta persona avanzar en su carrera.
Valor y dedicación en el cuidado de enfermedades degenerativas
Jesús habla también sobre lo complicado que es enfrentar situaciones de enfermedad degenerativa, especialmente al inicio. Reconociendo lo duro que es para los cuidadores familiares, quienes, sin tener formación previa, se entregan con cariño y dedicación. Menciona que con el tiempo, los cuidadores se convierten en parte de la familia, pero también enfrentan altibajos emocionales. Resalta la importancia de no solo brindar cuidados físicos, sino también ofrecer escucha activa y tiempo para las familias, ya que eso es fundamental para sobrellevar la situación. En resumen, destacó el valor y la valentía de quienes cuidan a sus seres queridos en momentos difíciles. Por último resalta que siempre se recibe más cariño de vuelta, lo que hace que el esfuerzo valga la pena y así contribuir a hacer la vida más llevadera para quienes lo necesitan.
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