La Diputación de Granada ha decidido hoy en el Comité de Seguridad y Salud reforzar las medidas de prevención de la plantilla que presta servicio en las residencias de mayores de Armilla y Huéscar y en el Centro para Personas con Discapacidad Reina Sofía, además de los Servicios Sociales Comunitarios.
Este órgano reúne a los representantes de las organizaciones sindicales, en nombre de los trabajadores de la institución, y está presidido por el diputado de Recursos Humanos, José García Giralte. También ha estado presente la diputada de Centros Sociales, Adela Álvarez.
El encuentro ha servido para hacer un repaso de las medidas sanitarias que se están poniendo en marcha tras la declaración del estado de alerta y la crisis sanitaria generada por el Covid-19. El diputado de Recursos Humanos ha señalado la situación “especialmente sensible” del personal de las residencias La Milagrosa (Armilla) y Rodríguez Penalva (Huéscar), del Centro para Personas con Discapacidad Reina Sofía (Armilla), además de los trabajadores de los centros de Servicios Sociales Comunitarios, que están repartidos por toda la provincia.
“El análisis general ha sido positivo, aunque que la situación es cambiante”, ha explicado Giralte, que ha informado que se ha generalizado el uso de mascarillas en los centros “que no es obligatorio pero que contribuye a que los trabajadores desarrollen su labor con más tranquilidad”.
También se ha propuesto la reducción de turnos en los centros sociales, y se han hecho previsiones para el caso de tener que sustituir personal, que se llevaría a cabo con contrataciones “de manera que el servicio no tenga que resentirse”.
Igualmente, se ha planteado la posibilidad de seguir flexibilizando la jornada laboral, avanzar en el teletrabajo, reducir el trabajo presencial y dispensar a los empleados con hijos menores de 12 años o con mayores a su cargo. “Todo ello, para proteger la salud de nuestros trabajadores y sin quebrar la atención a los usuarios de nuestros servicios ni a los ciudadanos en general”, ha concluido.